¿Qué es un depósito de renta?Es el dinero que el inquilino le entrega al dueño del inmueble al momento de firmar el contrato de arrendamiento. Es importante señalar que esta cantidad debe pagarse en su totalidad para tener el derecho a habitar la casa o departamento en cuestión.
Por lo general dicho depósito equivale a uno o dos meses de renta y sirve como una garantía para el propietario en caso de que el arrendatario incumpla con los compromisos previamente pactados en el documento.
¿Por qué tiene relevancia?
Durante el plazo en que el inquilino habite un inmueble en renta, el pago funciona como un respaldo para el dueño en caso de que existan daños en la propiedad (por uso o descuido), que no se cumplan con las cuotas mensuales o que finalicen la relación de arrendamiento antes de tiempo.
Si se da alguno de los casos antes mencionados, al finalizar el contrato, el propietario tiene derecho de retener el depósito o hacer uso de él para reparar los daños o compensar la morosidad de su residente temporal.
Por lo general, en el contrato de arrendamiento se estipula el estado en que se entregó la propiedad y las condiciones en las que se encuentra al momento de empezar a habitarlo. Si realizas algunas modificaciones al inmueble sin previa autorización, podría ser otro de los motivos por los que podrías perder tu depósito de renta.
En la mayoría de los casos, esta cantidad te será entregada por completo en el plazo de 30 días una vez que el contrato de arrendamiento haya quedado invalidado y ya no habites la propiedad. Pero para asegurarte de que te entreguen el depósito debes poner especial atención en las cláusulas de tu contrato que condicionen la devolución de tu pago.
Por lo general dicho depósito equivale a uno o dos meses de renta y sirve como una garantía para el propietario en caso de que el arrendatario incumpla con los compromisos previamente pactados en el documento.
¿Por qué tiene relevancia?
Durante el plazo en que el inquilino habite un inmueble en renta, el pago funciona como un respaldo para el dueño en caso de que existan daños en la propiedad (por uso o descuido), que no se cumplan con las cuotas mensuales o que finalicen la relación de arrendamiento antes de tiempo.
Si se da alguno de los casos antes mencionados, al finalizar el contrato, el propietario tiene derecho de retener el depósito o hacer uso de él para reparar los daños o compensar la morosidad de su residente temporal.
Por lo general, en el contrato de arrendamiento se estipula el estado en que se entregó la propiedad y las condiciones en las que se encuentra al momento de empezar a habitarlo. Si realizas algunas modificaciones al inmueble sin previa autorización, podría ser otro de los motivos por los que podrías perder tu depósito de renta.
En la mayoría de los casos, esta cantidad te será entregada por completo en el plazo de 30 días una vez que el contrato de arrendamiento haya quedado invalidado y ya no habites la propiedad. Pero para asegurarte de que te entreguen el depósito debes poner especial atención en las cláusulas de tu contrato que condicionen la devolución de tu pago.